Centros de cuidado prologando y cárceles toman medidas para recibir a familiares
Una semana después que entrara en vigor la orden ejecutiva que autoriza las visitas de familiares a residentes de centros de cuidado prolongado, solo 20% de estas instituciones para adultos mayores ha reabierto.
La orden ejecutiva, además, permitió el reinicio de la visitas en las instituciones correccionales por primera vez durante la pandemia de coronavirus, pero estas no han reanudado debido a que aún no se completa la vacunación de los presos.
“Está en un 20% los (centros de cuido) que han abierto porque ha tomado tiempo preparar los espacios, orientar al personal en cuanto a las medidas, desarrollar el sistema de citas. Son una serie de procesos que uno tiene que tenerlos súper listos”, dijo Juanita Aponte, presidenta de la Asociación de Dueños de Centros de Cuidado de Larga Duración.
Aponte estimó que la totalidad de los centros de cuidado abrirá a partir de la semana próxima.
Además, reiteró la necesidad de que los empleados del Departamento de la Familia que van a supervisar los centros de cuidado prolongado tras su reapertura sean vacunados contra el COVID-19.
“Ya se está tomando en consideración que los empleados de Familia se vacunen. Entiendo que ya eso están programándolo”, sostuvo Aponte.
La reapertura de los centros y de las cárceles, incluyendo las instituciones juveniles, fue avalada por el gobernador Pedro Pierluisi, a partir del 15 de marzo, a través de la orden ejecutiva más reciente para manejar la pandemia del COVID-19.
Pero la designada secretaria del Departamento de Corrección y Rehabilitación, Ana Escobar, dijo que aproximadamente 2,500 reos, de una población de 7,143, aún no reciben la segunda dosis de la vacuna. Escobar indicó que, desde el 27 de marzo y de manera paulatina, comenzarán a abrir las cárceles y las instituciones juveniles para las visitas.
“Lo que nos queda es la segunda dosis, y esa segunda dosis va a terminar el viernes”, indicó la funcionaria.
Igualmente, dijo que aguardan por que el Departamento de Salud apruebe las guías a seguir. La secretaria designada aclaró que el documento está listo, pero Salud quiso hacerle un cambio menor.
“Son unos cambios adicionales, como la utilización de mascarillas a pesar de que estamos vacunados y el distanciamiento social para que persista”, explicó la secretaria designada.
A preguntas de este medio, dijo que 745 reos han declinado ser vacunados. Escobar indicó que, a esos confinados, no se les negarán las visitas, pero deberán seguir medidas más rigurosas.
“Tendrán que usar la indumentaria (de protección personal), que es una bata que se coloca como protección adicional al no estar vacunados, guantes, la mascarilla, un gorrito y un ‘face shield’ (protector para el rostro) para bajar y recibir visitas. La protección tiene que ser adicional para ellos”, recalcó Escobar.
Durante las visitas, no se permitirá el contacto físico, y cada preso puede recibir hasta dos visitantes.
Además, las cárceles que no contienen módulos de separación están siendo acondicionadas para asegurar que no haya contacto físico durante los encuentros.