COVID-19 en Puerto Rico: siete nuevas muertes y 553 casos confirmados
El COVID-19 cobró la vida de siete personas más en Puerto Rico, por lo que el total de víctimas mortales por el virus aumentó a 1,836, informó este lunes el Departamento de Salud.
La agencia detalló que los fallecimientos ocurrieron entre el 19 y el 31 de enero. Las muertes confirmadas suman 1,547 y las sospechosas 289.
Muertes nuevas informadas:
- Mujer de 67 años de la región de Bayamón
- Mujer de 62 años de la región de Caguas
- Hombre de 76 años de la región de Caguas
- Mujer de 74 años de la región de Arecibo
- Hombre de 59 años de la región de Arecibo
- Mujer de 77 años de la región Metro
- Mujer de 86 años de la región de Ponce
“El número de muertes adicionales no debe interpretarse como que estas hayan ocurrido en las últimas 24 horas. De igual forma, es importante señalar que el total de muertes puede variar en la medida en que se dan los procesos de registro y codificación de las causas de muerte, lo que puede tomar varios días”, explicó la dependencia.
Salud también informó 553 casos positivos confirmados, 115 casos positivos probables y 764 casos positivos sospechosos. Ante eso, los casos confirmados ascienden a 87,440 y los casos probables a 6,798. Los casos sospechosos son 69,231.
La totalidad de casos confirmados fue ajustada tras sumar un caso correspondiente al 12 de enero y restar cinco casos duplicados. También ajustaron el total de casos probables al restar 51 casos que tuvieron una prueba molecular positiva y sumar un caso con fecha de toma de muestra del 8 de enero. Salud también ajustó la totalidad de casos sospechosos al restar 54 que tuvieron una prueba molecular positiva, cuatro que tuvieron una prueba de antígenos positiva y sumar 23 casos previos al 16 de enero. Asimismo, restaron tres casos en esta última categoría.
Entretanto, la cantidad de pacientes hospitalizados por el virus se colocó en 282, de los cuales 55 están recluidos en una Unidad de Cuidados Intensivos y 40 están conectados a un respirador artificial. Hasta hoy, los hospitales del país cuentan con 211 camas de intensivo y 125 respiradores artificiales disponibles para adultos.
Según Salud, el término de caso positivo confirmado hace referencia a los contagios cuyo resultado fue validado mediante una prueba PCR (molecular). El caso probable es aquel cuyo resultado positivo a la enfermedad se obtuvo mediante prueba de antígenos. Mientras, los casos sospechosos, también conocidos como resultados de anticuerpos, son aquellos que arrojaron positivo a la prueba serológica, y no tienen una prueba molecular o antígenos positiva.
Además, la agencia explicó una muerte confirmada por COVID-19 corresponde al deceso de una persona con una o más pruebas moleculares positivas. La muerte probable es aquel deceso de un paciente que fue diagnosticado con COVID-19 mediante una prueba de antígenos o que su su cuadro clínico reúne los criterios para creer que padecía de COVID-19, pero nunca tuvo una prueba molecular o de antígenos para detectar el virus. Mientras, la muerte sospechosa se refiere al fallecimiento de una persona en la que se detecta un anticuerpo específico en suero, plasma o mediante una prueba serológica con su sangre.