Alcaldes de la montaña claman por un trato equitativo de Salud con las vacunas de COVID-19
Varios alcaldes de la zona central y montañosa de Puerto Rico clamaron este domingo un trato equitativo de parte del Departamento de Salud (DS) en la distribución de las dosis de vacunas contra el COVID-19, para garantizar al menos un acceso mínimo a la población vulnerable de estos municipios.
“Hemos solicitado que nos envíen vacunas para los envejecientes, pero no hemos tenido éxito. Nos dicen que no hay vacunas, que vamos a esta en turno, pero no llegan”, manifestó a este medio el alcalde de Jayuya, Jorge González.
El ejecutivo municipal sostuvo que el Centro de Diagnóstico y Tratamiento (CDT) del municipio está certificado y listo para comenzar a vacunar a los adultos mayores de 65 años o más desde antes que Salud anunciara el inicio de la fase 1-b de vacunación. Sin embargo, a pesar de que Salud instó a los proveedores a comenzar sus listas para la otorgación de turnos de vacunación, dicho CDT no ha recibido dosis adicionales a las primeras 200 que administró como parte de la fase 1-a.
“Es una situación difícil porque en Jayuya los envejecientes, como se da tanta promoción, ellos están desesperados porque se les ponga la vacuna. Nosotros habíamos hecho ya el plan de trabajo y teníamos 1,800 personas envejecientes, pero nos hemos quedado esperando la vacuna”, relató González, al tiempo que aseguró que, más allá de que no hay dosis suficientes, Salud no ofrecido ninguna explicación sobre sobre por qué allí no se han entregado dosis adicionales, mientras otros proveedores en la zona metropolitana han recibido varias entregas. “No se nos da el mismo privilegio que a los pueblos de la zona metro”, apuntó.
Salud anunció el pasado 10 de enero el inicio de la fase 1-b de vacunación, donde están ubicados los adultos mayores de 65 años o más. Esa semana publicó una primera lista de proveedores certificados para administrar la vacuna, a los que la ciudadanía podría llamar para recibir información y sacar una cita para vacunación. En el caso de Aguas Buenas, el centro de salud primaria 330 NeoMed Center fue uno de los que apareció en el listado público, indicó el alcalde Javier García. Allí la lista de espera de adultos mayores para vacunación, aseguró, ronda los 1,200, pero solo han recibido 220 dosis destinadas a esa población.
“Cuando comienza ese proceso con las primeras cien vacunas, la próxima semana me indican que en ese momento no tenían vacunas porque Salud entró en la vacunación de los maestros, eso afectó la llegada de vacunas a nuestro municipio”, apuntó el alcalde.
En Aguas Buenas tampoco se ha vacunado el personal de primera respuesta del municipio. “En el día de hoy tuve una comunicación con el general José Reyes (ayudante general de la Guardia Nacional), indicándole la necesidad que tengo. Me comunicó con la persona contacto en el Centro de Bellas Artes de Caguas para indicarme cuándo voy a pasar por el centro de vacunación con mi equipo de primeros respondedores”, relató, al sostener que se trata de unos 50 trabajadores.
García también indicó que está consiente de que el gobierno se encuentra en espera de un aumento en la cantidad de dosis que recibe la isla. “Ya me puse a la disposición de que, en el momento que sea preciso una vez tengan la capacidad de vacunas disponibles, puedo tener un centro de vacunación en el municipio”, sostuvo.
En el caso del Centro Integrado de Servicios de Salud en Lares, que es parte de la red 330, la lista de espera de adultos mayores asciende a 1,800, aseguró el alcalde Fabián Arroyo Rodríguez, pero no han recibido entregas de primeras dosis para esa población. “Hemos hecho una solicitud a Salud y lo que nos ha informado es que ahora mismo no tienen las dosis suficientes. Se comprometieron a que nos iba na enviar 120 (primeras dosis) desde la semana pasada y no llegan”, relató el alcalde.
“Salud les dio instrucciones de que hicieran el listado, la gente hace llamadas a diario, entonces le tenemos que informar la noticia de que no han llegado las suficientes dosis”, dijo. Arroyo también manifestó que se encuentra esperanzado en que se cumpla con prontitud la promesa del presidente Joe Biden de aumentar la cantidad de dosis de vacunas disponibles para las jurisdicciones estadounidenses.
En el caso de Cidra, el alcalde Ángel David Concepción expresó sentirse preocupado en cuanto a la disponibilidad y acceso a la vacuna contra el COVID-19 para los adultos mayores de 65 años o más que residen “campo adentro” en comunidades de difícil acceso o que no cuentan con transportación. “Necesitamos un plan de inmediato”, apuntó. Salud, por ejemplo, anunció el viernes que unas 1,042 personas encamadas habían sido vacunadas como parte del esfuerzo en el que apoya el Colegio de Médicos Cirujanos, un servicio que debe solicitarse mediante correo electrónico dirigido a [email protected]. Pero no está claro el alcance de esta iniciativa.
“Conocemos sectores campo adentro que necesitan, envejecientes que viven solos, que no tienen transportación, que las familias no pueden llevarlos (a un centro de vacunación) cómo alcanzamos esa población nos preocupa muchísimo”, manifestó. “Nos gustaría una mayor comunicación directa con los alcaldes, que son los que manejamos las comunidades de nuestro pueblo, que nos den más información exacta”, sostuvo Concepción.
Por su parte, el alcalde de Barranquitas, Elliot Colón Blanco, señaló que “en términos generales, está un poco lento (el proceso de vacunación)“, aunque dijo comprender que la llegada de las dosis a Puerto Rico también ha sido lenta.
“La preocupación es que la llegada de las vacunas a Puerto Rico sea la suficiente para nosotros poder vacunar a toda la población de Barranquitas y los pueblos limítrofes, esa es la esperanza que tenemos”, aseveró. En dicho municipio, se vacunaron ayer unos 243 adultos mayores de 65 años, en el centro de vacunación ubicado en la Universidad Interamericana.